La separación prematura o temprana de un bebé recién nacido de su madre es una practica lamentablemente habitual en algunas facilidades sanitarias y lo cierto es que resulta sumamente perjudicial para el niño que acaba de llegar al mundo y que necesita la cercanía con su mamá para adaptarse adecuadamente. En la actualidad esta practica cruel está tendiendo a desaparecer en los hospitales pero aún quedan algunos lugares en donde se sigue implementando. En el articulo de hoy te contamos un poco más acerca de cuales son las consecuencias negativas de una separación abrupta del bebé recién nacido y su mama.
¿Por qué no se debe separar al recién nacido de su mama?
Separar de la madre al bebé recién nacido inmediatamente después del parto es una practica que tiene aproximadamente 100 años y que surgió en la cultura occidental: es frecuente ver que luego de nacer las enfermeras retiran al pequeño de su mamá para llevarlo a observación medica y realizarle chequeos pero lo cierto es que se ha demostrado que esta practica genera diversos efectos negativos en el niño y en la padre por lo que está tendiendo a desaparecer. Alrededor de 1970 surgió una corriente que comenzó a reclamar por la necesidad del contacto permanente y directo del recién nacido con su madre inmediatamente luego de nacer, recalcando la importancia de que se establezca un vinculo afectivo tanto para el bienestar del bebé como de la mamá.
¿Cuáles son los efectos y las consecuencias negativas que se generan a raíz de separar abruptamente al bebe de su mamá luego del parto? Veamos algunas de ellas:
- No permitir que el bebé y la mamá tengan contacto inmediato puede llevar a que se produzca un fracaso en la lactancia materna o que se genere un destete precoz del niño. Se ha demostrado que cuando no se facilita el acceso inmediato al pecho materno se producen más problemas al intentar generar la lactancia en un primer momento.
- Ser separados de su mamá ni bien llegan al mundo puede generar altos niveles de estrés en los bebés. Se ha podido verificar que los niños que son separados de sus madres al nacer sufren de un ascenso en los niveles de cortisol automáticamente, aunque solo se trate de unos pocos minutos.
- Además de lo mencionado los traslados abruptos y demasiado tempranos del bebé para revisiones lo exponen a la posibilidad de entrar en contacto con agentes infecciosos. Su sistema inmunitario aún está inmaduro y puede resultar potencialmente peligroso separarlo de su mamá con tanta urgencia sin permitirle adaptarse.