Nuestra fabrica de peluches
Cuántos niños han soñado con ir a la fábrica de Papá Noel, allí donde todos los sueños se hacen realidad, donde los duendes ayudan a fabricar todo tipo de juguetes desde la muñeca más deseada hasta el tren más moderno y cómo no el más tiernos de los peluches. Bien, pues en España y más concretamente en Madrid se encuentra la que ha sido una de las fábricas más importantes a nivel nacional de muñecos de peluche “ Artesanía Cuadrado” y que emulando a la fábrica de Papá Noel ha dado vida a millones y millones de peluches desde hace casi medio siglo.
Hoy dedicamos nuestro tiempo a ahondar un poco más en este mundo que para muchos es un gran desconocido y que está lleno de magia para los más pequeños y para los que no lo son tanto.
El mundo del muñeco de peluche
El muñeco de peluche es una artículo completamente artesanal, lo cual ya sorprende hoy en día que se encuentra todo automatizado y que la mayoría de los artículos se hacen mediante ordenadores y máquinas sin ver en muchas ocasiones la mano del hombre. En el caso del peluche es todo lo contrario, la mano del hombre es absolutamente imprescindible , por ello en Artesanía Cuadrado nos cuentan que los peluches son como las personas, cada uno tiene su personalidad y sus características y al igual que las personas unos son más altos, otros más bajos, los hay guapos y los hay más feos pero con ese encanto especial que hace que cuando un niño tiene un peluche no quiera cambiarlo por ningún otro, aunque se suponga que es el mismo, porque , al igual que las personas, cada muñeco de peluche es absolutamente único y él podría reconocerlo entre miles que fueran aparentemente iguales.
Fases del proceso
Todo comienza con los patrones, de la misma manera que en el mundo de la moda, aquí también se utilizan los patrones que nos permitirán cortar las distintas piezas del muñeco.
Posteriormente las piezas se cosen una a una incluyendo las etiquetas de tela que nos informarán de las características del muñeco hasta hacer el muñeco evidentemente del revés, este es el momento de añadir aquellas piezas tales como ojos , nariz etc que se pondrán con máquinas a una presión suficiente para que el niño no pueda quitarlos . Tras ello es el momento de dar la vuelta al muñeco para poder rellenarlo, esta parte es muy curiosa, hay que meter un palo de madera para poco a poco ir sacando cada manita o cada patita del muñeco hasta verle tal y como será aunque aún sin rellenar, será precisamente por el agujero que se ha dejado para dar la vuelta al muñeco por donde se procederá con el rellenado del mismo. El relleno actualmente suele ser fibra hueca siliconada que le confiere a la pieza una suavidad única.
Una vez terminado el muñeco se procede con el etiquetado y el embolsado y estará listo para su venta.
Lo más interesante de todo el proceso es darnos cuenta de que lo mencionado anteriormente, que cada peluche es único.